En el último post que escribí el miércoles pasado sobre la evolución en todos los sentidos del cine de animación ya lo mencionaba: Walt Disney compraba a Pixar en 2006. Ahora, le voy a dedicar esta entrada a ese acontecimiento, a esa unión entre las dos productoras más conocidas dedicadas al cine de los dibujos animados.
En un principio se unieron para producir conjuntamente una serie de películas (de cine de animación tridimensional). Ocurrió a mediados de la década de los noventa, cuando estas dos productoras formaron una sociedad para producir tres películas que seguro que todos conocemos y, la gran mayoría, las habrán visto. Éstas son: Toy Story, Buscando a Nemo y Los Increíbles.
En enero del 2006 ya habría acabado el contrato que unía a Disney y Pixar. Al terminar estos tres proyectos parecía haber acabado la relación entras las dos productoras por disputas y no llegar a un acuerdo en la repartición de los beneficios entre Steve Jobs, consejero delegado de Pixar y más conocido como el dueño de Apple, y Michael Eisner, el que era presidente de Disney en aquel momento.
Disney cambió de presidente por Robert Iger. El nuevo presidente arregló las relaciones con Pixar y tras varios encuentros con Jobs y Ed Catmull (presidente de Pixar) llegaron a un acuerdo mediante una oferta de compra que consistía en la adquisición de la empresa de animación Pixar por un valor de 7.400 millones de dólares. Además, los accionistas recibieron 2’3 acciones de Walt Disney por cada una de las acciones que tuvieran en Pixar. Esto convertía a Steve Jobs en el mayor accionista de Disney con un 7% de las acciones, valoradas en 3.500 millones de dólares, además de ocupar un puesto de directivo en la nueva empresa formada finalmente en el verano de ese mismo año, en 2006. Los demás cargos quedaron así: Ed Catmull como presidente de la nueva empresa creada entre Disney y Pixar; y Jhon Lasseter, genio de las maravillas de Pixar y vicepresidente de la empresa lo nombraron como Chief Creative Office.
Con esta unión, Disney incluyó en su compañía personas con mucho talento e imaginación para futuros proyectos que hoy vemos su fruto en películas como Cars o la nueva Up, porque para algunos expertos de cine, hace tres años la compañía estaba empezando a decaer.
A continuación una imagen de Steve Jobs, mayor accionista de la compañía y el que fue el dueño de Apple (ya que en la actualidad ha abandonado dicha empresa):